Si quieres, curarme puedes

La curación del leproso (Mc 1 , 40-45)

El diseño de este mes es un original trampantojo, (trampa o ilusión con que se engaña a alguien haciéndole ver lo que no es) en formato lettering diseñado por mi hija, inspirado en una de las primeras curaciones de Jesús del capítulo 1 del evangelio de San Marcos, la de un leproso que se le acerca de rodillas.

Si leemos con detenimiento este pasaje podemos identificar claramente que las palabras exactas del leproso en este episodio, y que también están en Mateo (Mt 8, 2-4) y Lucas (Lc 5, 12-16) fueron: “Si quieres, puedes curarme (o limpiarme, depende de la traducción)”. Sin embargo el diseño, si se lee de lejos parece que dice únicamente “si quieres, puedes” ya que la palabra “curarme” queda un poco disimulada en el diseño. ¿Por qué este trampantojo? Para poner de manifiesto cómo los pequeños detalles hacen que una expresión cambie completamente su sentido.

Podríamos decir que la frase “si quieres, puedes” es el lema de nuestra sociedad occidental, donde mi esfuerzo, mi capacidad, mi sacrificio, mi etc… es lo que me permite conseguir mis logros y mis objetivos. Esta es una frase donde el único protagonista soy yo y mi yo es la medida de la grandeza de mi vida. Es una frase que no permite el fracaso y si éste ocurre, la misma frase te culpabiliza y te recuerda que no has hecho lo suficiente o incluso, que, como la vida no es justa, otro tiene la culpa de que tú no hayas conseguido tu meta.

Ahora bien, si la recogemos tal como la dijo el leproso, “si quieres, puedes curarme” es una frase de absoluta humildad y convencimiento del poder de Dios. Esta frase está tan llena de sabiduría, que para el diseño la hemos dotada de ese halo de enseñanza jedi y la hemos re-escrito como “si quieres, curarme puedes”.

Esta frase acepta mis limitaciones y confía en la misericordia de Dios. Esta frase no es una petición o una queja, es sencillamente LA frase con la que poner mi esperanza en Dios, que ya sabe lo que yo necesito.

Así en el contexto de este milagro y este diseño, podemos destacar tres elementos que nos pueden valer para nuestro día a día:

  • Esta curación nos invita a orar desde la esperanza y no desde la queja, reconociendo la grandeza y el poder del Señor. ¡Qué gran lección de humildad y confianza la de este leproso, que de rodillas y lleno de fe se acerca a Jesús porque sabe que es capaz de curarle su enfermedad! ¿Te acercas tú también así a la oración o sabes reconocer, y lo haces habitualmente en la oración la grandeza de Dios? A mí, este short del papa Francisco me impactó profundamente y ha cambiado completamente cómo empiezo mi oración personal. (https://youtube.com/shorts/hFlHQtUMho8?si=tWHgTnbMbZMh1QKL)
  • Este milagro nos recuerda cómo Dios nos cura desde la cercanía. Al igual que la lepra apartaba al leproso de la vida social y de la sinagoga, nuestro pecado nos aleja de la iglesia y de su vida sacramental. Sólo el abrazo de Jesús, que nos toca y limpia nuestros pecados en el sacramento de la confesión, y que siempre está dispuesto a hacerlo, nos permite volver a disfrutar en gracia de nuestra vida de manera plena.
  • Finalmente, el diseño nos anima a cuidar los pequeños detalles en nuestra vida de fe diaria que nos acercan o nos alejan cada día un poco más del Señor. Puede ser leer el capítulo de un libro, repetir una pequeña oración o un misterio del rosario, degustar los múltiples audios o videos que reflexionan sobre el evangelio del día o incluso poner Radio María en el coche cuando estás de reparto logístico. Todo lo que te ayude a poner tus ojos en él y en su poder, te dará paz en el alma y sentido a tu día.

Por cierto, si eres de los que te gusta imaginar cómo podría haber sido esta curación, la puedes disfrutar en el capítulo 6 de la primera temporada de The Chosen aquí . Este milagro actúa perfectamente en la trama de la serie como nexo de unión entre el milagro de las bodas de Caná (el leproso dice que una hermana suya estaba en la boda) y la curación del paralítico al que bajan por el techo de donde estaba Jesús, porque una de las que llevaba la camilla vio esta sanación (Tamar, para los que seguís la serie).

Te pedimos Señor que apliquemos la humildad y confianza del leproso a nuestra vida de oración para decirle Señor, si quieres TU puedes limpiarme.

#teatrevesalucirlo


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