La escuela de María

Hágase (Lc 1, 38)

El diseño de este adviento se inspira en el discurso que dio el Papa Juan Pablo II en su viaje apostólico a España en mayo de 2003 delante de casi un millón de jóvenes en la base aérea de Cuatro Vientos, Madrid. En ese discurso, que puedes encontrar aquí, el Papa invitó a los jóvenes a unirse a la Escuela de María tras haber rezado el rosario con ellos. Nosotros estuvimos allí hace 20 años (de hecho, fue el primer gran evento relevante al que íbamos como novios) y sus indicaciones siguen siendo válidas hoy, que llevamos 17 años de casados y tenemos dos hijos. Creemos que los diferentes aspectos que se destacan en este discurso pueden ser un buen “temario” para este tiempo fuerte de Adviento que comienza, donde María es protagonista.

¿Y cuál es la frase por excelencia de la Virgen María? Fiat = Hágase… por eso hemos rebautizado así a su escuela… Igual que en el relato de la creación Dios creó al mundo con un hágase (“fiat lux”, Gn 1, 3) sin pedir permiso a la humanidad, en su encarnación en cambio sí cuenta con el hágase de María (“»fiat mihi secundum verbum tuum», (Lc 1,38) para llevarla a cabo.

Es más, en el Padre Nuestro también se incluye otro “fiat” (‘Fiat voluntas tua’) que el mismo Jesús no solo nos enseña, sino que también nos lo demuestra cuando está en Getsemani (“Padre, si quieres, aparta de mí este cáliz; pero no se haga mi voluntad, sino la tuya» (Lc 22,42). Así pues, qué mejor nombre para la escuela de María que FIAT.

Volviendo al discurso del San Juan Pablo II, sus tres elementos fundamentales se recogen en el escudo de esta Escuela de María, elevada al nivel de Universidad para que el diseño recuerde la típica sudadera universitaria internacionalmente reconocida, que nos presentan las tres grandes asignaturas que se estudian en esta escuela: 

• La acción. Representada por el corazón roto. “Testimoniad con vuestra vida que las ideas no se imponen, sino que se proponen. Sólo así, viviendo la experiencia del amor de Dios e irradiando la fraternidad evangélica, podréis ser los constructores de un mundo mejor.” El Papa en 2003 ya estaba preocupado por la falta de paz en el mundo y lamentablemente sigue siendo una realidad hoy; no solo por la falta de paz producto de la violencia, que mata personas, sino también por la falta de paz producto de la falta de esperanza, que mata almas. Aprovechemos este tiempo de Adviento para salir de nuestro ombliguismo y acercarnos más a nuestro prójimo y sus necesidades.
• La contemplación. Representada por el rosario. “El drama de la cultura actual es la falta de interioridad, la ausencia de contemplación. Sin interioridad la cultura carece de entrañas, es como un cuerpo que no ha encontrado todavía su alma”. Qué mejor manera de contemplar, serena y pausadamente, las escenas fundamentales de la vida de Cristo que con el Rosario. Aprovechemos este tiempo de Adviento, donde se recuerdan los diferentes misterios gozosos a lo largo de las diferentes semanas hasta Navidad para acercarnos de nuevo a esta preciosa y sencilla oración.
• La evangelización. Representada por la custodia, porque como nos recuerda el Papa, “¡id con confianza al encuentro de Jesús! y, como los nuevos santos, ¡no tengáis miedo de hablar de Él! pues Cristo es la respuesta verdadera a todas las preguntas sobre el hombre y su destino. Es preciso que vosotros jóvenes os convirtáis en apóstoles de vuestros coetáneos. No os desaniméis, porque no estáis solos: el Señor nunca dejará de acompañaros, con su gracia y el don de su Espíritu. Aprovechemos este Adviento para encontrarnos con el Señor en el sagrario y en la Eucaristía con un corazón limpio y humilde para que de veras nos transforme y podamos ser luz entre nuestros “contactos” porque “tu vida puede ser la única Biblia que muchos de ellos lean”.

Esperamos que este Adviento decidas “apuntarte” con nosotros a trabajar estas asignaturas y qué mejor hacerlo con su “sudadera oficial” que puedes encontrar en nuestra tienda online, con capucha o sin capucha y ahora, en nuevos colores.

#teatrevesalucirlo